Por Maria José Sousa Martinez, miembro de NEWCORRED.
Después de tantos vaivenes de la vida, por fin estoy haciendo lo que me gusta, tener mi propia oficina y dedicarme solo a mi empresa y a mis clientes.
Soy María José Sousa, corredora en Sousa & Asociados y estoy feliz. Se que va a costar un poco, pero no tengo prisa. Todo llegará.
Soy una superviviente de la vida, a los 18 años tuve mi primera hija conciliando la vida familiar, laboral y mis estudios de forma complicada. Con 29 años tenia ya 4 hijos y seguía trabajando, estudiando y conciliando. Lo tenía claro, tenía que sacar adelante a la familia y con un sueldo se veía complicado.
Mi jornada laboral nunca se ha interrumpido por temas personales. Siempre he cumplido mi jornada y he rendido como la que más. Pero no era suficiente. Ahí empezó todo.
Con 35 años me divorcié y empecé de nuevo, nunca mirando atrás, y emprendiendo como asesora fiscal y colaborando en una compañía de seguros. Antes de eso, al ir a entrevistas de trabajo, ya podréis imaginar lo que sucedía cuando me preguntaban por mi situación. Divorciada y con 4 hijos. ¡¡¡¡Ya te llamaremos!!!! Pero nunca llegaba el momento. Era frustrante. Una vez en una empresa mentí con respecto a los hijos, no sé por qué lo hice, comenté que tenía dos, y sí que me contrataron. Yo a los dos días desvelé la realidad y. como siempre, a la semana no había superado el periodo de prueba.
Mi mayor ilusión fue tener mi propia oficina, pero eso es complicado en los inicios. Las compañías prefieren que trabajes en las suyas propias y hacen todo lo posible para que no te vayas.
Durante el confinamiento tuve tiempo para ponerme al día de lo que significaba ser corredor de seguros y gracias a quierosercorredordeseguros.es me ayudaron a conseguirlo. Ellos me gestionaron el expediente en la DGSFP y me ayudaron con cualquier duda que tuviese al respecto. Hoy por hoy, sigo confiando en el equipo de NEWCORRED y sé que los tengo a mi lado en todo momento.
La idea de ser corredora era asesorar a los clientes y darles la mejor opción con todas las compañías posibles, y no solo con una, después de estudiar cada caso individualmente. Antes era imposible al trabajar solo con una compañía, pero ahora es increíblemente mejor.
Hoy por hoy, estoy en mi propia oficina como quería, valorando las mejores opciones para mis clientes en función de cada caso individualizado, y a su vez colaborando con mi hijo que es administrador de fincas, sin prisa pero sin pausa. Desde la oficina damos los mejores servicios de todo tipo mirando siempre por el beneficio del cliente. Tengo claro que la mejor publicidad la ofrecen clientes satisfechos y este es nuestro lema: «La mejor forma de gestionar tu patrimonio».
Tengo la sensación de que nos va a ir muy bien pudiendo conciliar la vida familiar con la laboral que es lo que siempre buscamos las mujeres emprendedoras, pese a que hoy por hoy se hace muy difícil.
El día 17 de junio tuve mi segunda nieta, y se que lucharé por ella como por el resto de la familia.
Desde aquí os incito a que no os conforméis con nada, que todo se puede, lo imposible se intenta, y que con una actitud positiva, el día a día se supera con creces.
Que, por ser mujer, madre y abuela, se puede seguir luchando como la que más. Que no se nos caen los anillos, por estudiar, trabajar y cuidar de la familia, y siempre será así.
Eso nos distingue sin duda a las mujeres emprendedoras.