De acuerdo con el Barómetro de Prácticas de Pago elaborado por Crédito y Caución, solo el 2% de los intercambios comerciales entre empresas en Finlandia resulta impagado.
Redacción ‘MS’- De acuerdo con el Barómetro de Prácticas de Pago 2023 elaborado por Crédito y Caución, el 56% de las facturas en las operaciones entre empresas se pagan en Finlandia en el plazo acordado. El 42% del crédito comercial que los proveedores conceden a sus clientes a la hora de cobrar sus productos y servicios en el mercado finlandés se cobra con retraso y solo un 2% resulta impagado.
«El barómetro detecta un enfoque muy cauto para vender a crédito entre las empresas de Finlandia. El 54% de las ventas se realizaron en efectivo y, por lo tanto, libres de riesgo de incumplimiento de pago. Casi el 40% de las empresas finlandesas que solicitaron crédito comercial a sus proveedores vieron sus solicitudes rechazadas», explica el informe.
En ese contexto, solo el 12% de las empresas finlandesas ha experimentado un aumento de los plazos de pago de sus clientes, por debajo del 15% que ha registrado una disminución. De cara al cierre de 2023, el 70% de las empresas finlandesas prevé un crecimiento en su negocio y un 49% espera poder ampliar sus márgenes. El 23% anticipa una mejora de las prácticas de pago de sus clientes, por encima del 15% que espera un deterioro.
La evolución de los precios ha tenido un fuerte impacto sobre el tejido productivo finlandés. Solo el 4% de las empresas no ha sufrido cambios en su estructura de costes debido a la inflación. El impacto principal se ha producido sobre los costes financieros (para el 33% de las empresas) seguido de la caída de la demanda de sus productos y servicios (23%), los costes de producción (14%) los costes laborales (14%) y los costes de almacenamiento y mantenimiento de inventario (10%).
Para proteger a la empresa de la falta de liquidez y evitar el riesgo de quedarse sin efectivo debido a los retrasos en los pagos, un 33% de las empresas ha reforzado sus procesos internos de control del crédito, un 26% ha buscado financiación externa, un 24% ha retrasado el pago de sus propias facturas transmitiendo los problemas de morosidad a lo largo de la cadena de suministro, un 23% ha incrementado el tiempo y los recursos que dedica al cobro de facturas impagadas y un 22% ha retrasado sus inversiones.