Redacción ‘MS’- La distorsión arquitectural es la tercera lesión más frecuente en mamografía asociada al cáncer de mama. Su diagnóstico resulta muy complejo y acostumbra a la combinación de mamografía, ecografía y biopsia. Cerca de dos tercios de las cirugías que se practican para tratarla podrían ser innecesarias, según ha estimado Felipe Gómez Gómez-Acebo, jefe de sección de Radiología de Mama del Hospital Universitario Sanitas La Moraleja. Así lo ha explicado Sanitas a través de un comunicado reciente.
“Es una lesión que a los radiólogos nos plantea múltiples dificultades en su manejo. Debemos saber cómo detectarla, cómo definirla, si son todas iguales, cómo hay que biopsiarla y, finalmente, si la cirugía es necesaria o no”.
Felipe Gómez Gómez-Acebo, jefe de sección de Radiología de Mama del Hospital Universitario Sanitas La Moraleja.
Tras practicar cirugía, las distorsiones presentan algo menos de un tercio de resultados benignos, casi otro tercio de alto riesgo y más de un tercio son malignos. “Esto quiere decir que algo menos de dos tercios podrían tener cirugía innecesaria, aunque lo difícil es distinguir cuáles serían”.
El doctor Gómez Gómez-Acebo ha llegado a esta conclusión junto a radiólogos del Hospital Universitario Sanitas La Moraleja, el Hospital Universitario Ramón y Cajal, el MD Anderson Cancer Center y la Fundación Tejerina con los que ha desarrollado un estudio de casos que ha culminado con un acuerdo de colaboración en sus áreas de Patología Mamaria a través de una asociación científica para el manejo de la patología mamaria. El acto de constitución ha tenido lugar en el Hospital Universitario Sanitas La Moraleja, con una sesión interhospitalaria de actualización a través de casos clínicos y con la ponencia Distorsión arquitectural: de la cicatriz radial al carcinoma infiltrante, realizada por la Dra. Naiara Linares, del Servicio de Radiodiagnóstico del Hospital Universitario Sanitas La Moraleja.
La suma de estos cuatro centros punteros en patología mamaria responde a su voluntad de intercambiar información clínica y buenas prácticas, para poder alcanzar evidencias científicas que, por separado, resultan más difíciles de obtener.
La nueva asociación tiene como uno de sus primeros objetivos estudiar la relación entre las distorsiones arquitecturales y la cirugía. En concreto, es particularmente importante saber si son necesarias, o no, las cirugías posteriores a biopsias en las distorsiones.
“Hemos comprobado que quizá estamos haciendo más operaciones de las debidas y que podemos mejorar en el diagnóstico de las lesiones que hay que operar y las que no. Para ello, primero de todo, hay que caracterizar bien la distorsión, dado que hay algunas características en imagen que nos pueden ayudar a definir lo que es sospechoso. Luego, debemos utilizar mejor los métodos de biopsia, con agujas de alto calibre, para intentar extirpar de manera percutánea la lesión. Cuanto más extirpemos de la lesión, más fiable será el diagnóstico. Por último, como las distorsiones son lesiones grandes, hay que tener en cuenta la resonancia magnética o técnicas de contraste para decidir sobre cuál sí y cuál no debe someterse a cirugía”.
Felipe Gómez Gómez-Acebo, jefe de sección de Radiología de Mama del Hospital Universitario Sanitas La Moraleja.
La misión de la nueva asociación es ampliar los estudios que ya han realizado para contar con mayor evidencia a la hora de elegir el abordaje en cada caso.
La Unidad de Patología Mamaria del Hospital La Moraleja es una de las más importantes de Madrid. “Somos hospital de referencia para toda la zona norte de la Comunidad y nos dedicamos a una doble actividad: un cribado dirigido, es decir, screening de mama, y estudios de biopsia, diagnósticos y manejo de pacientes. Además, nos beneficiamos de nuestra estructura como unidad integrada y multidisciplinar, que mantiene contacto permanente con todo tipo de especialistas del hospital, como ginecólogos, oncólogos y radioterapeutas con el objetivo de lograr un diagnóstico lo más individualizado posible”, ha resumido el Dr. Gómez Gómez-Acebo.