Ciberseguridad y privacidad encabezan los riesgos para las empresas españolas

Ciberseguridad y privacidad encabezan los riesgos para las empresas españolas

Redacción ‘MS’- El reciente informe ‘People Risk 2022 Survey’ elaborado por Mercer Marsh Benefits, concluye que la ciberseguridad y la privacidad de datos se sitúan como los riesgos corporativos más temidos por las empresas españolas, una preocupación que comparten el resto de compañías europeas y multinacionales. Ambas amenzas se integran dentro la categoría ‘aceleración de la digitalización’, donde preocupa especialmente la obsolescencia de la tecnología aplicada a los Recursos Humanos, el fuerte impacto de la Inteligencia Artificial y la automatización de los procesos. Otro de los grandes riesgos que deberán afrontar las empresas españolas a lo largo de los próximos años son los relacionados con la gobernanza y las finanzas, entre las que destaca el aumento del coste de los beneficios de salud y bienestar para los empleados.

El estudio también ha detectado un desajuste entre los departamentos de recursos humanos y los de gestión de riesgos en cuanto a sus prioridades y estrategia. Así, mientras Recursos Humanos permanece alerta ante los riesgos específicos de las personas –pandemias, coste de beneficios, flexibilidad del trabajo o automatización de tareas– Riesgos se focaliza en cuestiones operativas, administrativas y tecnológicas. Este motivo lleva al estudio a concluir que el éxito de las empresas dependerá de una estrategia centrada en las personas y de la necesaria colaboración entre ambos departamentos. Esta sinergia les permitirá adoptar una estrategia más proactiva y anticiparse a eventos disruptivos para su negocio.

El estudio analiza una muestra de 1.380 profesionales de Recursos Humanos –de los cuales 105 trabajan en empresas españolas que han ofrecido su visión y estrategia de gestión respecto a una clasificación de 25 riesgos corporativos, que a su vez Mercer Marsh Benefits ha divido en 5 categorías: salud y seguridad; gobernanza y finanzas; aceleración de la digitalización; talento y cuestiones sociales y medioambientales.

A nivel global, todas las regiones coinciden en señalar la ciberseguridad como el riesgo más relevante para sus organizaciones. Regiones como Europa y Pacífico posicionan los eventos catastróficos como el segundo riesgo que más les preocupa, mientras Asia y Estados Unidos lo relega a un cuarto puesto. Otro riesgo destacado es el incremento del coste de los beneficios de bienestar para los empleados, un riesgo que se acentúa con el incremento del deterioro de la salud mental –que ha escalado de un 63% en 2019 al 81% en 2022– tal y como ha puesto de relieve el último informe de tendencias ‘Global Talent Trends’.

En este sentido, nueve de cada diez (el 87%) encuestados afirma que los riesgos de salud y seguridad suponen una seria amenaza para el negocio.

Un reto especialmente complicado dado que seis de cada diez (59%) confiesa no disponer de políticas específicas para administrar sus seguros y beneficios laborales. Por otro lado, la mitad de los directivos traslada su preocupación por la carencia de talento con las habilidades digitales necesarias y las dificultades para atraerlo. A mitad del ranking, en el quinto puesto, el cambio en la forma de trabajar ha provocado que el 43% de los líderes se replanteen su propuesta de valor hacia el empleado y procurar un entorno de trabajo más diverso, equitativo e inclusivo. Afrontar estos retos depende en gran medida de la capacidad de modificar el comportamiento personal, una cuestión que más de dos quintos de los encuestados (43%) considera la principal barrera.

A nivel mundial, menos de la mitad de las empresas dice contar con políticas, controles y sistemas de soporte de ciberseguridad efectivos como autenticación de factores múltiples, gestión de proveedores o cifrado de datos. Desarrollar, adquirir y retener las habilidades necesarias para la transformación digital y la gestión cibernética es fundamental. Las empresas deben diseñar beneficios para personas con habilidades para el futuro, quizás roles que aún no existen.

Las recientes disrupciones en las cadenas de suministros, la escalada de la inflación, los desastres medioambientales ahondan en el agotamiento de la fuerza laboral, que ha de ser más resiliente que nunca para dar una respuesta ágil a las cambiantes necesidades del negocio. Precisamente este es el factor crucial que hace necesaria una aproximación a los riesgos corporativos desde un enfoque de protección de los empleados.

“Los empleados desean trabajar para empresas socialmente responsables. Por lo tanto, las organizaciones deben definir valores y objetivos enfocados a factores ASG y emplearlos en su evaluación de beneficios, sus inversiones y condiciones de trabajo. Las prioridades incluyen proteger a los empleados, implementar políticas ambientales y renovar el enfoque en las iniciativas de diversidad, equidad e inclusión”.

Isabel Bolea, directora de gestión de beneficios en Mercer Marsh Benefits.

En este contexto las organizaciones están reevaluando sus prioridades para centrarse, no solo en los beneficios, sino en el bienestar integral de sus empleados y un firme propósito para crear un modelo de negocio verdaderamente sostenible alejado del indeseado ‘greenwashing’.