A medida que se asienta la posibilidad de una prolongada invasión rusa de Ucrania, las perspectivas de la eurozona se vuelven más sombrías.
Redacción ‘MS’- Crédito y Caución prevé que el crecimiento del PIB de la eurozona se contraiga un -0,1% en 2023, lo que supone una revisión a la baja de 2,6 puntos porcentuales respecto a las previsiones de hace seis meses. A medida que se asienta la posibilidad de una prolongada invasión rusa de Ucrania, las perspectivas de la eurozona se vuelven más sombrías por su mayor exposición al conflicto, dada su proximidad geográfica y la dependencia de importaciones de combustibles fósiles. A partir de 2024, la aseguradora de crédito espera que el crecimiento vuelva a repuntar hasta el 2,1%, a medida que desaparezcan los efectos negativos de la guerra. De acuerdo con el escenario de referencia difundido por Crédito y Caución, el PIB de la zona euro entrará previsiblemente en recesión en el cuarto trimestre de 2022 y se mantendrá en valores negativos durante el primer trimestre de 2023.
Crédito y Caución prevé que la inflación siga siendo elevada al cierre de 2022 pero se reduzca en 2023, a medida que el efecto de los elevados precios de la energía desaparezcan y se diluyan los cuellos de botella en la cadena de suministro. Si la inflación fuese más persistente de lo previsto, un endurecimiento monetario adicional podría ralentizar el crecimiento del PIB de la zona euro en 2023 hasta el -1,5%.
La desaceleración en curso es visible tanto en los servicios como en el sector manufacturero. Aunque las presiones sobre la oferta han mejorado recientemente, la producción industrial afronta el aumento de los costes energéticos, las interrupciones del suministro, la escasez de insumos y el debilitamiento de la demanda. La evolución de las exportaciones también se ha visto afectada por la incertidumbre geopolítica, la elevada inflación y unas condiciones económicas más débiles en todo el mundo.
La debilidad del consumo será una de las claves del desempeño de 2023. El Economic Outlook difundido por Crédito y Caución prevé que el empleo en la zona euro muestre una leve contracción en 2023 y que el gasto de los consumidores en la región caiga en el cuarto trimestre de 2022 y en el primero de 2023, a medida que se debiliten los ingresos reales y se mantenga la alta tasa de inflación. Aunque es probable que el crecimiento del consumo se recupere a partir del segundo trimestre de 2023, en el conjunto del año la previsión es de un crecimiento acumulado del 0,1%.
La expansión económica ha impulsado una reducción de los déficits públicos en 2022. El déficit público global de la eurozona se redujo del 5,1% en 2021 a cerca del 2,9% en 2022. No obstante, a medida que se debilite la actividad económica, el déficit de la eurozona volverá a aumentar situándose en 2023 y 2024 por encima del objetivo del 3% fijado en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento. Debido a las continuas medidas de estímulo fiscal, la deuda pública de la eurozona representará el 94% del PIB en 2022 y el 95% en 2023 y 2024.