Redacción ‘MS’– El pasado mes de noviembre, Zurich presentó en Madrid la iniciativa ‘Prepárate para la vida’, consistente en un proyecto de formación que se orienta a jóvenes y adolescentes, de la mano del Dr. Álvaro Bilbao, doctor en Psicología y neuropsicólogo. Con el apoyo de la Zurich Foundation, su objetivo es apoyar a docentes y padres en la gestión de su labor educativa en el ámbito escolar y consta de un programa de formación para jóvenes con edades comprendidas ente 12 y 16 años fuera del circuito académico.
‘Muy Segura’ ha recabado la opinión del Dr. Álvaro Bilbao al respecto de esta iniciativa:
¿En qué consiste ‘Prepárate para la Vida’ y por qué surge esta iniciativa?
El programa “Prepárate para la vida” consiste en una serie de sesiones, concretamente ocho, que están dirigidas a alumnos que estén cursando la ESO y que tiene como objetivo principal ayudarles a desarrollar sus competencias en distintos ámbitos vinculados a la inteligencia emocional. Es por ello por lo que vamos a trabajar aspectos que suelen aparecer en esta etapa y que además preocupan. Por ejemplo, podemos señalar algunos aspectos como la toma de decisiones, la afectividad, el estrés, el sueño, el descanso o las adicciones a las tecnologías.
La iniciativa surge a partir de una sinergia entre la Fundación Zurich y el trabajo que vengo realizando con adolescentes en los últimos años. Lo cierto es que durante mis formaciones en institutos he recibido una respuesta muy positiva de su parte. Los chicos están deseando conectar con alguien en quien confiar porque eso les permite resolver dudas, aunque no es fácil teniendo en cuenta que no hay muchos expertos especializados en estrés en toma de decisiones o en desconexión digital.
Dr. Álvaro Bilbao: «El programa ‘Prepárate para la vida’ consiste en una serie de sesiones, concretamente ocho, que están dirigidas a alumnos que estén cursando la ESO y que tiene como objetivo principal ayudarles a desarrollar sus competencias en distintos ámbitos vinculados a la inteligencia emocional».
¿Qué situación de partida detectan en relación con la labor educativa que desempeñan docentes y padres en el ámbito escolar? ¿De qué manera persigue ayudarles este proyecto?
De facto, detectamos que los chavales presentan altos grados de ansiedad y estrés durante su ciclo en la ESO. En muchos casos, esta problemática está relacionada con temas como la falta de descanso, el abuso de tecnologías, la toma de decisiones respecto a su futuro, la dificultad para organizarse o el hecho de planificar su estudio de una manera racional y sensata.
Los equipos de orientación hacen un gran trabajo, ya que a veces los chicos escuchan más a alguien que viene de fuera que a una persona que asocian con el sistema educativo. Respecto a los padres, hay un poco de todo, pero uno de los objetivos del programa es favorecer la comunicación entre los chicos y los padres, ya que una comunicación fluida en el terreno familiar les va a ayudar a resolver problemas y a reducir sus niveles de estrés.
Dr. Álvaro Bilbao: «Uno de los objetivos del programa es favorecer la comunicación entre los chicos y los padres, ya que una comunicación fluida en el terreno familiar les va a ayudar a resolver problemas y a reducir sus niveles de estrés».
¿En qué medida pueden desarrollarse y detectarse el estrés y la ansiedad en el grupo de jóvenes objetivo (12-16 años) y cómo puede combatirse desde edades tempranas?
El estrés aparece por múltiples razones a lo largo de esta etapa (12-16 años). La principal causa suele ser la sobrecarga de tareas escolares y extraescolares, pero también debemos tener en cuenta otros factores como, por ejemplo, la incertidumbre por la elección de itinerarios escolares, la presión por la famosa “nota media”, la falta de sueño, la interacción con dispositivos electrónicos o la necesidad de integrarse en un grupo de iguales. La mejor manera de combatirlo pasa por ofrecer estrategias a los jóvenes que les permitan comunicarse con la familia, reducir la sobrecarga de trabajo, controlar el tiempo con las tecnologías, favorecer un descanso adecuado y además confiar en su propia toma de decisiones.
Dr. Álvaro Bilbao: «La mejor manera de combatir el estrés pasa por ofrecer estrategias a los jóvenes que les permitan comunicarse con la familia, reducir la sobrecarga de trabajo, controlar el tiempo con las tecnologías, favorecer un descanso adecuado y además confiar en su propia toma de decisiones».
En su opinión: ¿está el bullying lo suficientemente bien detectado en los centros escolares españoles? ¿Qué medidas deberían implementarse en los centros para mejorar su detección y poder combatirlo?
Respecto al bullying, hay que decir que en las escuelas ya existen los protocolos necesarios de detección e intervención para estos casos. Sin embargo, en el ámbito digital es mucho más complicado, ya que los adultos no tenemos la misma capacidad de supervisión. Considero que el aspecto más importante a la hora de detectarlo, prevenirlo y combatirlo es que haya una cultura de tolerancia cero frente al bullying.
Para muchos padres todavía es normal y aceptable que su hijo diga en casa que hay un niño de clase que es un pringado. Podríamos decir que se acaban normalizando este tipo de comportamientos, ya que se acaban justificado cuando nos referimos al ‘pringado’. Al final, los pequeños actos de discriminación son los que dan pie a la violencia, especialmente en el caso de los niños con menos autocontrol. Es importante que tanto los padres como las escuelas adopten una actitud de tolerancia cero frente a la discriminación y burlas que, además, dan paso al acoso. Normalmente, nos echamos las manos a la cabeza cuando vemos o escuchamos de un niño al que han golpeado zarandeado y grabado con el móvil, pero eso no ocurre de la noche a la mañana y antes de llegar a esos extremos ha habido muchos comportamientos que podemos detectar y frenar con antelación.
Dr. Álvaro Bilbao: «Es importante que tanto los padres como las escuelas adopten una actitud de tolerancia cero frente a la discriminación y burlas que, además, dan paso al acoso».