De acuerdo con el último Estudio de Crédito y Caución e Iberinform, el 9% de las empresas no aplica una política de riesgos para gestionar la prospección de clientes.
Redacción ‘MS’- El control del riesgo de crédito a lo largo del ciclo económico implica un equilibrio inestable entre las áreas más técnicas de la empresa y los departamentos comerciales enfocados al crecimiento. Los departamentos financieros participan en la definición de la política de riesgos en el 66% de las empresas, por encima del 43% en las que tienen peso las áreas comerciales. La dirección general juega un papel de arbitraje en el 67% de las empresas y solo un 20% se ha dotado de departamentos especializados de riesgos de acuerdo con la oleada de otoño del Estudio de la Gestión del Riesgo de Crédito en España, que impulsan Crédito y Caución e Iberinform, en el que han participado los gestores de cerca de 600 entidades de todos los tamaños y sectores.
De acuerdo con las conclusiones del estudio, la gestión de la política de riesgos comerciales presenta todavía muchas carencias. Uno de los datos más negativos es la evolución en el uso de los criterios de solvencia en la selección de clientes. El 35% de las empresas gestiona de forma deficiente su riesgo de crédito al no utilizarlos en sus análisis. El ratio actual está seis puntos por encima del 29% que marcaba en los años más severos de la crisis anterior.
El tejido empresarial también está lejos de consolidar los comités de riesgos. El 69% de las firmas no cuenta con estas estructuras para el control sistemático y transversal de la cartera de clientes que permite la revisión, aprobación y recomendación de límites en la exposición al riesgo. El ratio actual está veintisiete puntos por encima del 42% que marcaba en la crisis anterior.
El 62% de las compañías no cuenta con procedimientos estructurados que definan por escrito su política de riesgos comerciales y, quizás el dato más preocupante, el 9% de las empresas no aplica ningún tipo de política de riesgos para gestionar los posibles impagos en sus procesos de prospección.