Por Mayte Martínez, periodista especializada en belleza y bienestar; creadora del espacio Belleza eres tú.
Los nuevos años 20 que acaban de empezar dejan atrás dietas draconianas, una vida en pos de la vigorexia y la tanorexia y maquillajes cargados de tóxicos. Repasamos lo que fue y será la belleza en los tiempos modernos. Más allá de cremas y afeites, para tener un mejor aspecto, ya somos conscientes de que además hay que cuidar la salud, la alimentación, el ocio y todos los agentes externos e internos que nos mantienen en equilibrio con nosotros mismos y nuestro entorno.
Las nuevas generaciones apuestan por una vida sana sin agobios centrada más en los autocuidados, la salud mental y la espiritualidad, con la crisis climática y la sostenibilidad en mente; una belleza sostenible basada en la protección (solar, frente a la contaminación, luz azul…) y la prevención real, actuando antes de que se presente en problema. Sí, el mundo de la belleza cada vez se hace más amplio y en él siguen primando las tendencias externas, nails art en las uñas, flequillos despuntados, pieles naturales y glitters en los maquillajes de fiesta; con la medicina estética cada vez más accesible como un elemento más a tener en cuenta que ya no hay que esconder. Sí, ‘años 20 cambalache’, emulando el cantar, donde la apariencia externa prima más que nunca pero, parece que ahora sí, como reflejo de lo bonito que hay dentro.
«Más allá de cremas y afeites, para tener un mejor aspecto, ya somos conscientes de que además hay que cuidar la salud, la alimentación, el ocio y todos los agentes externos e internos que nos mantienen en equilibrio con nosotros mismos y nuestro entorno».
De ayer a hoy. Seguirá siendo tendencia la cristaloterapia, los rodillos faciales y la dieta vegetariana. Pero además se pondrá de moda el ejercicio facial, las gafas para protegernos la vista contra la luz azul de las pantallas, prestar atención al cuerpo al completo, aprender a respirar correctamente y viajar a destinos secundarios, en clave sostenible, para evitar el impacto medioambiental y los destinos de turismo masivo que estresan más que relajan. Pero vayamos por partes.
«Seguirá siendo tendencia la cristaloterapia, los rodillos faciales y la dieta vegetariana».
Atención a la luz azul
Pasamos de media casi cuatro horas diarias delante del ordenador, lo que puede estar relacionado con problemas de insomnio y degeneración macular. Para 2020, la tendencia es racionalizar el tiempo que miramos la pantalla, apagar el móvil, el ordenador y la tele a una hora razonable, mínimo 30 minutos antes de ir a dormir, porque eso nos puede ayudar a descansar mejor y protegernos la vista. Las empresas tecnológicas se han puesto las pilas para reducir la exposición a la luz azul. Algunas empresas de móviles tienen lo que llaman ‘turno de noche’, que radia una luz filtrada. Hay gafas que bloquean la luz azul que a partir de este año seguro que se popularizarán. Y por supuesto cremas que nos protegen de esa dañina luz azul en la piel que provocan las hora de trabajo que no podemos evitar frente a la pantalla del ordenador. Por ejemplo, Crema multiacción Age Protect de Uriage, hidratante que protege el rostro de la luz azul y corrige los signos de la edad.
«Las empresas tecnológicas se han puesto las pilas para reducir la exposición a la luz azul».
Medicina Preventiva
Hasta ahora, más que en prevenir, nos hemos centrado en el diagnóstico precoz. Pero llegamos tarde a la mayoría de los eventos patológicos. Hay que centrarse en acciones realmente preventivas, es decir, que evitan que la enfermedad se instale, y no que la diagnostican cuando ya está instalada, aunque sea precozmente. Vamos a hacer hincapié en los hábitos de vida. Alejandra Menassa, médico internista y presidenta de SESMI (Sociedad Española de Salud y Medicina Integrativa), nos pone como ejemplo el ejercicio regular, el isométrico con pesas, muy útil a la hora de remineralizar el hueso, con lo que vamos a prevenir y retrasar la Osteoporosis. También tomando alimentos ricos en calcio y en magnesio. Con el ejercicio también prevenimos el riesgo cardiovascular, junto con una dieta que evite el sobrepeso y el abandono del tabaco. El Parkinson y el Alzheimer también se pueden prevenir o retrasar, aun cuando genéticamente se esté predispuesto a ellas. La epigenética (hábitos saludables de vida), puede hacer que la genética no se exprese. Hay que mantener una actividad mental, leyendo, aprendiendo nuevas cosas, e incluir grasas saludables, omega 3 aceite de oliva, frutos secos (las nueces son neuroprotectoras)…
Para prevenir el cáncer debemos evitar los disruptores endocrinos (sustancias que pueden tener actividad sobre las hormonas sexuales): El bisfenol A del recubrimiento de las latas metálicas de conservas, los pesticidas… Es importante comer ecológico u orgánico. Y un largo etcétera de trastornos que podemos evitar con gestos tan básicos como reducir el exceso de carnes, la ingesta de azúcar, aumentar los niveles de vitamina D y, por supuesto, hacerse las revisiones de rutina. Prevenir, de verdad, es tendencia.
«Hay que centrarse en acciones realmente preventivas, es decir, que evitan que la enfermedad se instale, y no que la diagnostican cuando ya está instalada, aunque sea precozmente».
Maquíllate, maquíllate
Cuidadas por dentro y acicaladas por fuera. Pero con discreción. La nueva década ha empezado con un maquillaje más natural, con pieles más limpias, colorete y labios menos perfilados con bocas que brillan en tonos rosados para no recargar demasiado los looks. El gloss regresa para dar volumen y jugosidad. Las amantes del mate podrán llevarlo difuminado y dando color al centro, suavizando su resultado y haciéndolo más romántico. El ingrediente principal es el blush, acompañado de pequeños puntos de iluminador para dar un aspecto jugoso pero natural.
Maquillaje de fantasía en momentos puntuales. El glitter conquista párpados y labios, delineados de pedrería y boca con destellos de purpurina.
El eyeliner seguirá reinando prolongándose hasta el párpado inferior. El negro es un clásico, pero esta temporada cede protagonismo a su contrario. Se llevará solo o con discretas sombras de ojos, para dar originalidad al look.
Las uñas, geométricas pero cortas y discretas. Si antes primaba lo excesivo, estilo Rosalía, ahora se llevan cortas y esmaltadas en tonos pastel, con manicura francesa o al natural con brillo. Nail art minimalista, pequeñas flores, tie dye discreto, dibujos geométricos con finas líneas, círculos o pequeños trazos.
«La nueva década ha empezado con un maquillaje más natural, con pieles más limpias, colorete y labios menos perfilados con bocas que brillan en tonos rosados para no recargar demasiado los looks».
Cabellos, más cortos que largos
Flequillos despuntados, melenas despeinadas, cortes desestructurados. Adiós a las formas perfectas. El equipo artístico de Llongueras asegura que los cortes de esta temporada rompen con todos los esquemas. Triunfarán los mullet y los veremos en diferentes largos y texturas: liso, rizado, fosco… Priman las versiones modernas del icónico corte ochentero, con un componente punk que aporta versatilidad a la hora de peinarse. Pueden lucirse con looks elegantes y con otros más desenfadados.
Parecido al mullet, pero con un degradado menos exagerado, está el shag o shaggy, un estilo perfecto para cualquier tamaño de cabello que favorece a las caras con formas alargadas y ovaladas. Atrevidos y sexys, pueden prolongarse hasta media melena también con mucho potencial por la infinidad de stylings que permite crear. Además, para quienes tienen el pelo rizado es un corte perfecto porque disimula el encrespamiento. Los shag que predominarán serán cortos, curl y con flequillo.
Los pixies tendrán también su momento y para 2020 jugarán con los desfilados y las texturas: laterales y nuca muy cortos; volumen en la zona alta y un flequillo desenfadado con un cierto aire roquero que favorece mucho.
Aquellas que no estén dispuestas a cortar por lo sano pueden decantarse por un bob con un flequillo desfilado y muy marcado.
Aunque, como en todo, la tendencia no debe nunca arrastrarnos. A la hora de realizarse cualquier corte hay que tener en cuenta la forma de la cara por lo que es importante preguntarle al estilista para que nos asesore.
«Flequillos despuntados, melenas despeinadas, cortes desestructurados. Adiós a las formas perfectas. El equipo artístico de Llongueras asegura que los cortes de esta temporada rompen con todos los esquemas».
Aprendizaje, sostenibilidad, gastronomía y cuidado en tiempo de ocio
La cultura ‘hiperlocalismo’ en clave sostenible, el turismo gastronómico y la personalización de experiencias que generen conocimiento, se cuelan en la agenda viajera de 2020 según encuesta realizada por Barceló Hotel Group.
Para minimizar el impacto medioambiental, los desplazamientos a destinos secundarios y la apuesta por las experiencias locales vivirán un repunte de actividad, apostando por lugares menos conocidos. Frente al turismo masivo, las experiencias locales ganan fuerza. Para nuestro tiempo de ocio, buscamos salud y bienestar, donde la gastronomía es una de las principales experiencia para descubrir, a través de la cocina de proximidad, la cultura local. Nuevos platos, restaurantes, recetas, chefs y conocer a fondo la gastronomía del lugar sería el plan elegido por el 46% de los encuestados. Disfrutamos diseñando planes DIY (do it yourself), estancias en base a experiencias locales que reporten conocimiento.
Más del 80% afirma que disfruta de la organización previa y, una vez en destino, se buscan experiencias que generen recuerdos memorables y que impacten de manera positiva y enriquecedora, ampliar sus conocimientos. Se trata de disfrutar del tiempo libre en pos de la felicidad y el bienestar que provoca recíprocamente.
Vivencias a través de experiencias transformadoras con las que sentirse en equilibrio.
«Para minimizar el impacto medioambiental, los desplazamientos a destinos secundarios y la apuesta por las experiencias locales vivirán un repunte de actividad, apostando por lugares menos conocidos».
Tendencias en Medicina Estética
Que la belleza genera felicidad es indiscutible. Cuidarse es salud y sentirse bien es necesario para que todo fluya. Con el paso del tiempo nuestro organismo se ralentiza y funciona con mayor dificultad creando problemas por dentro y por fuera. Si hacemos todo lo posible por mejorar una osteoporosis, artrosis, falta de memoria y prevenir toda enfermedad, ¿por qué no hacer lo mismo con la flacidez de la piel, aparición de arrugas o cambios en el rostro y/o cuerpo que generan ansiedad y problemas de autoestima? Cada vez somos más conscientes de esto, de la importancia de mantener un buen aspecto sin querer aparentar quienes no somos ni una edad que no nos corresponde. Por eso la medicina estética se posiciona en estos años 20 como una prioridad más. Lip Design, resiliencia, prejuvenation, toxinas de acción rápida, minilipos… son los términos que se manejarán este principio de década. Desde el Centro Lajo Plaza nos comentan las tendencias que más triunfarán.
Botox. Las nuevas toxinas botulínicas van a suponer un repunte. Por un lado está la inminente llegada de la toxina coreana, que presume de tener una mayor durabilidad a un menor precio; por otro, la californiana, que también asegura una mayor duración; y por último, el llamado ‘botox de acción rápida’, que va a permitir que muchas mujeres recurran a él a modo de tratamiento flash.
Minilipos. La zona del cuello va a ser la nueva niña mimada de la medicina estética y los nuevos mini cabezales de fibra óptica de plataformas láser como Fotona van a permitir realizar micro lipoesculturas de precisión para eliminar la papada y definir el mentón y la línea mandibular.
Resiliencia. Mantener la mímica facial será el objetivo a conseguir cuando se utilicen materiales de relleno. Los nuevos ácidos hiaurónicos, más biocompatibles y de cadenas largas, son más elásticos y maleables. Su estructura es dinámica y mantienen las propiedades viscoelásticas naturales.
Hilos recubiertos. Una nueva tecnología de hilos tensores, los hilos de polidioxanona recubiertos de ácido hialurónico, mejorarán los efectos y la durabilidad del tratamiento, ya que primero se reabsorbe el ácido hialurónico y después el hilo, alargando su tiempo de acción.
Ácido hialurónico en doble plano. La nueva tendencia es, en una misma sesión, inyectar a nivel de la superficie para mejorar la calidad de la piel, y a nivel profundo para reposicionar volúmenes y difuminar arrugas. Se trata así el rostro de manera global, con un resultado más eficaz y duradero.
Prejuvenation. La prevención llega al universo de la medicina estética y la mujer va a comenzar a invertir cada vez más en tratamientos que aseguren un buen proceso de envejecimiento. La edad de entrada cada vez es más temprana y las mismas que a los 20 años se realizan tratamientos de hidratación destinados a mejorar la calidad de la piel, acudirán a las consultas a los 30 para detener, a base de toxina botulínica, la formación de las arrugas de expresión.
Lip Desing. El aumento de volumen deja de ser el objetivo principal y los labios se tratarán desde todos los abordajes posibles. Rejuvenecimiento, hidratación en el caso de las pacientes más jóvenes, tratamientos para la sonrisa gingival… La armonía y el diseño de la sonrisa perfecta serán los objetivos a conseguir.
«Si hacemos todo lo posible por mejorar una osteoporosis, artrosis, falta de memoria y prevenir toda enfermedad, ¿por qué no hacer lo mismo con la flacidez de la piel, aparición de arrugas o cambios en el rostro y/o cuerpo que generan ansiedad y problemas de autoestima?»
Parece que la nueva década se presenta con un buen número de novedades estéticas a nivel externo e interno, de salud y bienestar, cuidando la mente, los hábitos cotidianos y también, ‘of course’, lo más visible, el pelo y la piel, porque la vida es un todo, compuesto de pequeñas cosas y detalles que hay que aprender a mantener en equilibrio. ¡Disfrutemos de los nuevos años 20 con todas sus propuestas!
