Durante la pasada Semana del Seguro, NEWCORRED, la organización profesional de nuevos corredores y corredurías de seguros, entregó el ‘Premio al Mérito Emprendedor’ en la categoría de ‘Mediadores con más de 50 años de trayectoria profesional’ a D. Manuel Serrano Gallego, fundador de la Correduría de Seguros Serrano y Reverte.
A continuación, y al hilo del valor del relevo generacional en el sector, ofrecemos el artículo de opinión de su hija, Verónica Serrano Reverte.
Mi vínculo con el mercado asegurador viene desde que tengo uso de razón, debido a que cuando tus padres trabajan juntos en una empresa familiar, es casi imposible no hablar del tema oficina en casa o, incluso, ir a hacer los deberes a la oficina de tus padres.
Con el paso del tiempo, mi hermana María del Carmen estudió Derecho, se puso a trabajar en la oficina de mis padres haciéndose especialista en accidentes de tráfico, montando con el tiempo su propio gabinete de abogados. Yo, más tarde, hice la licenciatura en Economía y, desde que salí de la universidad, trabajé en la correduría y en asesorías fiscal-contable, lo que me permite hoy gestionar al cien por cien la correduría.
«Desde que salí de la universidad, trabajé en la correduría y en asesorías fiscal- contable, lo que me permite hoy gestionar al cien por cien la correduría».
El relevo generacional es algo que se consigue con el tiempo y caminando de manera firme. Los cambios siempre llevan consigo periodos de adaptación que conllevan un seguimiento continuo. De lo contrario, no se consigue avanzar, porque a todo el mundo nos cuesta salir de la zona de confort.
Lo que tenemos claro tanto María del Carmen cómo yo, es que vamos a seguir con el negocio que montó Manuel hace más de 50 años, porque ya tenemos experiencia ambas en este sector y porque los valores profesionales inculcados y también adquiridos de otras empresas con las que hemos tenido relación laboral nos van a permitir seguir hacia adelante.
«El relevo generacional es algo que se consigue con el tiempo y caminando de manera firme. Los cambios siempre llevan consigo periodos de adaptación que conllevan un seguimiento continuo».
Desde que soy madre de dos niñas de cinco y un año, es casi imposible ir a diario a la correduría. Como me encargo de la administración y la informática, desde que nació mi primera hija decidí que si quería ver a mis hijas y trabajar a la vez, la única opción era el teletrabajo.
Conseguí hacerlo porque el equipo humano que hay en la correduría me lo permitió. Porque, sin estar yo, los clientes siguen estando bien atendidos y no notan mi ausencia. Mi equipo humano les transmite que, aunque no estoy allí, estoy en contacto diario con la oficina. Nuestra mejor herramienta para tener cercanía y conexión con la oficina es el empleo del whatsapp web entre el equipo humano, que permite que me sienta como si estuviera allí, existiendo un diálogo casi continuo durante toda mi jornada laboral, y se hace más llevadero todo.
«Como me encargo de la administración y la informática, desde que nació mi primera hija decidí que si quería ver a mis hijas y trabajar a la vez, la única opción era el teletrabajo».
Es primordial para trabajar desde casa tener la oficina totalmente digitalizada y que cualquier cosa que se necesite para realizar el trabajo se pueda visualizar sin tener que molestar a nadie e interrumpir lo menos posible al equipo humano.
Me siento súper orgullosa porque, gracias a esta experiencia, muchas de las cosas que no estaban digitalizadas, hoy lo están y eso supone un avance para el día a día de la correduría.
