La Asociación Española de Mujeres Empresarias de Madrid, ASEME, colabora en esta sección con ‘Muy Segura’ con el objetivo de dar a conocer a nuestra audiencia los diversos y valiosos perfiles de sus empresarias que constituyen, sin duda, un claro ejemplo para tod@s nosotr@s.
Este mes entrevistamos de nuevo a nuestra primera participante en la sección en 2019, Eva Serrano Clavero, presidenta de ASEME y Vicepresidenta-Socia Co-Fundadora en Deiuris Legal Partners.
Desde su anterior entrevista han sucedido muchas cosas en el mundo… Se ha atravesado, por ejemplo, una pandemia sanitaria sin precedentes. ¿Qué valoración realiza del cambio de escenario acontecido desde distintos puntos de vista: familiar, social, económico, empresarial…?
La verdad es que, en estos tres últimos años, la vida nos ha dado un giro de 360 grados, porque los escenarios a los que estábamos acostumbrados han cambiado en repetidas ocasiones, e incluso en un plazo de 24 horas, cuando se declaró el estado de alarma.
Ha sido una prueba para toda la humanidad en pleno Siglo XXI, en la que quizás íbamos tan rápido, que habíamos dejado de apreciar muchas cosas de las que habitualmente nos rodean.
Creo que los límites de movimiento que hemos tenido, la perdida de seres queridos por un virus que apenas conocíamos, la incertidumbre, la distancia social, la rotura de cadenas de suministro, el teletrabajo, han tenido efectos negativos y positivos en todos nosotros.
Muchas familias han tenido la oportunidad de conocerse y replantearse su proyecto de vida al pasar tantas horas y días en sus domicilios. Otras, directamente, han asumido que carecían de dicho proyecto de vida y se han disuelto.
Las empresas han tenido que evolucionar y adaptarse a los nuevos escenarios en tiempo récord, han aprendido la viabilidad del teletrabajo y la necesidad de disponer de un plan de contingencia que favorezca el adoptar decisiones empresariales ante un cambio de escenario repentino.
Económicamente hemos entrado en una espiral, que yo ya no califico de crisis, sino más bien de montaña rusa en la que nos hemos subido y nos dejamos llevar.
Socialmente hemos pasado de la unión, apoyo y reconocimiento a los sanitarios, a los extremos contrarios. Es decir, solo hay que ver el contenido social de las noticias de diario y se nos pone de manifiesto que la violencia y la crispación comienza a ser habitual.
Quizás debería existir un canal de noticias en positivo, para reprogramarnos y darnos cuenta que vivir es una cuestión de urgencia, y que la sonrisa, el respeto y la empatía con el prójimo, es infinitamente más motivador que vivir en la crispación.
«Las empresas han tenido que evolucionar y adaptarse a los nuevos escenarios en tiempo récord, han aprendido la viabilidad del teletrabajo y la necesidad de disponer de un plan de contingencia que favorezca el adoptar decisiones empresariales ante un cambio de escenario repentino».
¿Qué acontecimientos y acciones clave ha desarrollado concretamente ASEME a lo largo de estos tres años?
Fundamentalmente, durante el tiempo de confinamiento, reforzamos el apoyo a nuestra red de empresarias, fomentamos la unión para que ninguna empresaria se encontrara sola ante la incertidumbre que vivimos, y facilitamos mediante la creación de un grupo de apoyo jurídico, todas asociadas de ASEME que trabajaron de manera voluntaria, la interpretación de las múltiples normativas que surgían y que afectaban al día día de las empresas.
Destaco de esta etapa el apoyo que las propias empresarias llevaron a cabo entre ellas que, dentro de la situación, permitió un sentimiento de grupo que evitó que muchas cayeran y no pudieran volver al mercado laboral.
Tras el confinamiento, mantuvimos nuestro Premio Anual, para seguir visibilizando el trabajo de la mujer empresaria. Fue la primera vez que se realizó en formato híbrido, lo que nos permitió compartir el Premio con nuestras empresarias de Latinoamérica, y tengo que reconocer que las premiadas de 2020 tuvieron discurso muy motivador para todas.
Actualmente, contamos con muchas solicitudes de nuevas socias que se han dado cuenta que es mejor pertenecer a un grupo con el que compartir el día a día, que seguir en el camino del emprendimiento sin red de apoyo, dados los continuos cambios que está experimentando el mercado.
«Contamos con muchas solicitudes de nuevas socias que se han dado cuenta que es mejor pertenecer a un grupo con el que compartir el día a día, que seguir en el camino del emprendimiento sin red de apoyo, dados los continuos cambios que está experimentando el mercado».
¿Y qué retos y desafíos principales afronta la Asociación en el medio plazo?
Retos y desafíos muchos, pero fundamentalmente, queremos crecer y atraer a más empresarias y emprendedoras, y dejar sentadas las bases para que ASEME continúe atrayendo a las nuevas generaciones. Tenemos más de cincuenta años de trayectoria y necesitamos que la iniciativa por la que surgió ASEME en 1969 siga viva para seguir fomentando la plena incorporación al mercado laboral de la mujer, como propietaria de su negocio asumiendo la responsabilidad desde dicha posición de tirar del resto de mujeres, para que ninguna se quede sola en el camino y no tenga la libertad de poder elegir.
Considero que el verdadero derecho a reivindicar es la libertad de poder elegir, de hacer valer tu talento y contar con la suficiente disponibilidad gracias a un buen ejercicio de la corresponsabilidad y apoyo para la conciliación, para no tener que enfrentarte a límites que, por cuestiones de género, nos vienen de serie.
Durante esta legislatura estamos trabajando para conseguir una formación de calidad para las empresarias que las ayude a romper el techo de cemento que a diario se autoimponen muchas de ellas, y dejen fluir todo el talento que llevan dentro, aprendiendo a gestionar su tiempo, conocimientos, y motivando la iniciativa empresarial.
Como siempre digo a la Administración Pública, las mujeres, empresarias o no, no somos víctimas, y no queremos subvenciones lineales que nos dejen en nuestra zona de confort. Queremos ayudas para emprender, formación, motivación, reconocimiento y visibilidad.
«Durante esta legislatura estamos trabajando para conseguir una formación de calidad para las empresarias que las ayude a romper el techo de cemento que a diario se autoimponen muchas de ellas, y dejen fluir todo el talento que llevan dentro, aprendiendo a gestionar su tiempo, conocimientos, y motivando la iniciativa empresarial».
Pongamos el foco en la mujer empresaria: ¿qué cambios está atravesando ésta, de qué manera se ve afectada de manera concreta por los distintos sucesos socio-políticos y económicos?
La mujer empresaria, en líneas generales, ha afrontado los mismos retos que el hombre empresario durante este último año, porque independientemente del género nos ha afectado a todos.
Sí es cierto que muchas mujeres empresarias contaban con negocios más pequeños, tradicionales, y el cambio de paradigma, o bien les hizo reinventarse en cuestión de 24 horas, o las llevó al cierre por no poder adaptarse al funcionamiento del mismo, a pesar a la tecnología.
Pero, como todos sabemos, hoy en día el coste de la vida se ha disparado y es bastante difícil salir adelante sin estar plenamente incorporado al mercado laboral.
Esto ha motivado que la mujer empresaria se haya visto en la necesidad de subirse al carro de las nuevas tecnologías y de los nuevos modelos de negocio, y está sabiendo aprovechar en líneas generales muy bien el teletrabajo, que le ha brindado la oportunidad de llegar a más sitios, sin moverse del lugar.
«Como todos sabemos, hoy en día el coste de la vida se ha disparado y es bastante difícil salir adelante sin estar plenamente incorporado al mercado laboral».
¿Cuál es la estrategia de ASEME para continuar apoyando a la mujer empresaria en un contexto como al que asistimos?
La estrategia de ASEME, en la actualidad, es básicamente fortalecer la red de asociadas, interactuar con otras asociaciones empresariales de mujeres para hacer grupo y compartir experiencias, iniciativas que pueden ayudar a facilitar el día a día.
También vamos a mantener el Premio Mujer Empresaria para el oportuno reconocimiento al trabajo de diario y facilitar referentes; y vamos a fomentar el la formación y el desarrollo de habilidades que todas y cada una de nosotras tenemos dentro, pero que por ese techo de cemento que nos acostumbramos a autoimponer, muchas veces no queremos ver.
En este mes de octubre asistiremos al Congreso Iberoamericano de Mujeres Empresarias en Buenos Aires, donde compartiremos las experiencias vividas durante estos tres años últimos y analizaremos oportunidades y propuestas de futuro, con mujeres empresarias de toda Latinoamérica.
Y en noviembre realizaremos nuestro Premio Anual Mujer Empresaria ASEME, donde estoy segura de que contaremos con unas finalistas que un año más serán un referente y motivación para aquellos y aquellas que todavía están en el comienzo o que, por el contrario, necesitan reinventarse y no saben por dónde empezar.
«La estrategia de ASEME, en la actualidad, es básicamente fortalecer la red de asociadas, interactuar con otras asociaciones empresariales de mujeres para hacer grupo y compartir experiencias, iniciativas que pueden ayudar a facilitar el día a día».
Realizando nuevamente un guiño al sector protagonista que nos atañe en Muy Segura, el mercado asegurador, ¿qué valoración realiza sobre esta actividad económica? ¿Y concretamente acerca del presente y futuro del corredor de seguros? ¿A qué retos protagonistas se enfrenta?
Por mi parte, tengo la percepción que el mercado asegurador ha conseguido poner en valor el porqué de su existencia. Es decir, habitualmente la ciudadanía contrataba seguros, y a mi parecer muchos lo hacían por ser una costumbre.
Durante la pandemia y tras la misma, tengo la percepción que finalmente se ha entendido por qué es necesario contar con seguros y, en concreto, por qué, además, necesitamos un buen corredor de seguros que nos explique y detalle qué es lo que realmente necesitamos.
Muchas empresas salvaron el confinamiento y el fenómeno Filomena por contar con buenos seguros que protegían su actividad y, con lo que cuesta levantar un negocio, esto es muy importante.
Siempre he sido firme defensora que, además, contar con un corredor de seguros es la mejor forma de dormir tranquilo, porque el mercado asegurador es tan amplio que solo un experto puede ayudar a estar protegido con el producto adecuado.
Y, respecto a los retos, yo creo que el más inmediato es concienciar entre otros, y en especial a las empresas, que en un mundo globalizado, conectado 24 horas, la Ciberseguridad es esencial y deberían contar con un seguro al respecto.
«Durante la pandemia y tras la misma, tengo la percepción de que finalmente se ha entendido por qué es necesario contar con seguros y, en concreto, por qué, además, necesitamos un buen corredor de seguros que nos explique y detalle qué es lo que realmente necesitamos».
¿Desea lanzar un mensaje a la mujer profesional que desarrolla su actividad desde distintos ámbitos de actuación y sectores, y que constituye una parte fundamental de la audiencia de Muy Segura?
Vivir en la zona de confort es una opción que no te asegura la libertad de poder elegir, es mejor salir de esta zona de confort, asumir retos pequeños, grandes y aprender a vivir y adaptarse al día día que surge en un Mundo globalizado, conectado 24 horas y con un entorno en continuo cambio. Para eso hay que formarse, motivarse y relacionarse procurando contar siempre con una buena red de apoyos y contactos.
«Hay que formarse, motivarse y relacionarse procurando contar siempre con una buena red de apoyos y contactos».
¿Quiere añadir algún comentario o valoración adicional?
Dar mi más sincero agradecimiento a esta iniciativa de Muy Segura, por visibilizar la trayectoria de grandes mujeres cuya lectura no solo es amena, sino enriquecedora y por visibilizar el sector del seguro más allá de la simple firma de una póliza de seguro.