La adopción del crédito comercial se convierte en una herramienta estratégica para estimular el crecimiento de las ventas empresariales ante la ralentización económica global.
Redacción ‘MS’- De acuerdo con el Barómetro de Prácticas de Pago 2023 difundido por Crédito y Caución, Vietnam ha registrado un notable aumento de las ventas a crédito en el B2B, que suponen ya el 67% de las operaciones totales, impulsado por la actividad de las pymes y los sectores agroalimentario y textil. Esto pone de relieve el creciente dinamismo de este mercado asiático y la voluntad de su tejido productivo de adoptar el crédito comercial como una herramienta estratégica para estimular el crecimiento de sus ventas en un contexto de ralentización económica global.
Los plazos de pago ofrecidos por las empresas vietnamitas se relajaron ligeramente en 2023 hasta situarse en el entorno de los 34 días. Las grandes empresas del sector químico son las que conceden los plazos más amplios para construir su ventaja competitiva internacional. El sensible aumento del crédito comercial ha incrementado claramente el riesgo de crédito. Un elevado 89% de las empresas afirma que la falta de liquidez de sus clientes finales es la principal razón de la morosidad comercial.
Para mitigar el riesgo de impago y los posibles problemas de tesorería, las empresas vietnamitas están dedicando recursos adicionales al recobro y ralentizando los pagos a sus propios proveedores. También se ha registrado un incremento del uso del seguro de crédito como estrategia de mitigación del riesgo, especialmente en el sector agroalimentario, donde el 70% de las empresas está explorando esta vía. Estas estrategias han logrado reducir en 2023 las facturas en mora en Vietnam, que solo afectan al 32% de las ventas, y los niveles finales de impago, que pasan de 6% de 2022 al 1%. El 60% de las empresas ha logrado reducir su promedio medio de cobro (DSO), que se sitúa en los 57 días desde la facturación.
El optimismo de las empresas vietnamitas sobre las perspectivas para 2024 se pone claramente de manifiesto en todos los indicadores clave del Barómetro. El 85% de las empresas prevé un aumento de la demanda de sus productos y servicios y un 68% también que espera un aumento de la rentabilidad.
La preocupación por el crecimiento económico mundial es el principal motivo de inquietud para 2024 en todos los sectores de actividad. Esto refleja el carácter exportador de muchas empresas del país y el gran desafío que supondría para su desempeño una recesión mundial. La volatilidad de los precios de las materias primas o la energía, junto con las presiones inflacionistas sobre los costes de producción, completan las preocupaciones del tejido productivo vietnamita.
