Redacción ‘MS’- Fundación Pelayo ha firmado un acuerdo con Manos Unidas, fruto de la resolución de su pasado concurso anual de proyectos para entidades sociales, para desarrollar un proyecto de cooperación internacional que ofrece asistencia integral a niños, jóvenes y familias vulnerables en riesgo de caer en las redes del tráfico humano y de explotación o que son víctimas de estas mafias, en la ciudad camboyana de Poipet, situada en la frontera con Tailandia. Así lo detalla Pelayo a través de un reciente comunicado.
El proyecto acoge y asiste a menores víctimas de la trata y los preparara para que puedan reintegrase en sus familias o lugares de origen, con el apoyo de un empleo o la continuidad de su formación.
Para formalizar este apoyo se ha suscrito un acuerdo en un acto institucional celebrado con la presencia de los presidentes de ambas entidades: Alvaro Gil-Robles, por parte de Fundación Pelayo, y Cecilia Pilar, por parte de Manos Unidas. El acto contó también con la presencia de José Boada, presidente de honor de Fundación Pelayo, Francisco Lara, presidente de Grupo Pelayo, y Cristina del Campo, Gerente de Fundación Pelayo, quienes trasladaron la especial preocupación de todo el Patronato de Fundación Pelayo por este tipo de circunstancias que se vienen dando en zonas geopolíticas conflictivas con corrupción endémica e incumplimiento de derechos humanos. El acto también estuvo arropado por Ana Luna, responsable de proyectos de Manos Unidas en el sudeste asiático, y Alejandro Garcia-Angulo, responsable de relaciones con empresas de la ONG.
«La colaboración en este proyecto de Manos Unidas, una Organización no Gubernamental para el Desarrollo cuyos objetivos están focalizados en la lucha contra el hambre, la pobreza, la enfermedad y las carencias en el ámbito educativo, social y de derechos humanos, refuerza el compromiso de Fundación Pelayo de ofrecer su apoyo ante las situaciones más desfavorecidas, como es esta de riesgo de trata humana en un punto neurálgico de los movimientos migratorios, entre Camboya y Tailandia, ofreciendo acogida y reinserción, con el objetivo de brindar una oportunidad a los colectivos afectados«, concluye Pelayo en su comunicado.