Redacción ‘MS’- En los últimos años, España ha experimentado un cambio significativo en el mercado inmobiliario, similar al que ya se ha visto en otros países europeos. La tendencia hacia el alquiler de viviendas en lugar de la compra se ha incrementado, impulsada por diversos factores económicos y sociales. Este fenómeno no solo ha cambiado el perfil del mercado inmobiliario, sino también los servicios asociados a la gestión de inmuebles en alquiler.
Así lo detalla Iris Global a través de un reciente comunicado.
El tradicional modelo de propiedad de vivienda en España está sumido en una profunda transformación, con una nueva generación que prefiere la flexibilidad del alquiler. Según el Instituto Nacional de Estadística, el porcentaje de hogares en alquiler aumentó del 18% en 2008 al 24,9% en 2022. Este cambio es más pronunciado entre los jóvenes de 25 a 35 años, un grupo que ha visto aumentar su preferencia por el alquiler al 40%, frente al 20% de hace una década.
Las razones detrás de este cambio son múltiples. La precariedad laboral y los altos precios de la vivienda dificultan el acceso a la compra para muchos jóvenes. Además, la movilidad laboral y la creciente urbanización han hecho que el alquiler sea una opción más atractiva. En ciudades como Madrid y Barcelona, el mercado de alquiler ha crecido significativamente, con un aumento del 30% en la oferta de inmuebles en alquiler entre 2018 y 2023, según datos de Idealista.
El papel clave de los servicios en la gestión de alquileres
El auge del alquiler ha llevado a un crecimiento paralelo en la demanda de servicios relacionados con la gestión de propiedades. Las empresas que gestionan múltiples inmuebles se enfrentan a desafíos únicos, como la rotación de inquilinos, la gestión de siniestros, etc. «En este contexto, contar con un partner especializado es crucial para ofrecer un servicio integral a los propietarios e inquilinos«, recuerda Iris Global en su comunicado.
«Las compañías como Iris Global, que ofrecen servicios de asistencia en el hogar, juegan un papel fundamental. Se adaptan a las necesidades de sus clientes, ofreciendo las mejores soluciones para facilitar la gestión de sus propiedades«, comenta la aseguradora.
La rotación de inquilinos, por ejemplo, es un proceso que puede ser complejo y costoso si no se maneja adecuadamente. Con la asistencia adecuada, se pueden realizar inspecciones previas y posteriores al alquiler, para asegurar que la propiedad se mantenga en óptimas condiciones y minimizar el tiempo que el inmueble está vacío entre la salida y la entrada entre inquilinos.
«El mercado de la vivienda en España ha evolucionado hacia un modelo más orientado al alquiler, en línea con la tendencia europea. Este cambio requiere una adaptación por parte de todos los actores involucrados, desde los inquilinos hasta las empresas de gestión de propiedades y los prestadores de servicios. La colaboración entre estos sectores es esencial para asegurar una transición fluida y beneficiosa para todas las partes«, concluye Iris Global.