Por María Candelaria Merlo, corredora de seguros asociada de NEWCORRED.
Era el año 2000 y comenzaba una aventura en mi vida profesional. Una sucesión de hechos apasionantes que con el paso del tiempo fueron tornándose cada vez más interesantes.
Este hubiera podido ser el comienzo de una historia de ficción, pero la vida siempre es una sorpresa y el día a día nos deja situaciones que bien pueden conformar capítulos de una novela o escenas de una película. Eso es lo que he ido viviendo en esta etapa de mi vida laboral.
Me llamo María Candelaria Merlo Delgado y soy Corredora de Seguros. Mi trabajo profesional lo desempeño en Activa Seguro, la marca comercial con la que desarrollo esta aventura que cada día va evolucionando y escribiendo nuevos capítulos.
Si me remonto a mi infancia, recuerdo que siempre me atraía lo artístico y desde niña ya sabía qué quería ser de mayor. Así que llegado el momento, ingresé en la Facultad de Bellas Artes, pensando que mi vida laboral giraría en torno a mi vocación artística.
Durante el curso académico me centraba en los estudios pero algún verano recuerdo pasarlo ayudando a mi padre que era agente de seguros. Comencé por archivar pólizas y a base de preguntar, me fui familiarizando con su mundo. Aunque entonces no lo sabía, todo ello despertaría el gusto por la que es hoy mi profesión.
Pasaron los años de universidad y todo cambió radicalmente. La idea que tenía de mi futura trayectoria profesional dio un giro de 180°. De la vida de artista pasé al trato cotidiano con clientes, sujeta a horarios y gestiones comerciales. Así comenzaba mi aventura.
Empecé por aprender lo básico e inicié a trabajar en el negocio familiar. Con la inquietud de tener una formación más solida, decidí adquirir los estudios que me capacitarían para ejercer como Corredora de Seguros, aunque esa opción no estaba en mis planes a corto plazo.
Actualmente, sigo pensando que la formación es un pilar en mi profesión. De hecho, hace algunos años, en mi afán por seguir aprendiendo y buscando cursos en internet, localicé a Jorge Campos. Ya tenía en mente empezar un nuevo capítulo de mi vida profesional. Esta vez como Corredora de Seguros.
«En aquella primera conversación telefónica, estuvimos hablando de la Escuela Práctica de Corredores y de la Asociación Profesional de los Nuevos Corredores y Corredurías de Seguros (Newcorred), que él mismo preside. Un hecho providencial que influiría luego en mi adhesión a esta gran asociación que cuenta con un merecido reconocimiento a lo largo de estos años de trayectoria».
Todos los que pertenecemos a Newcorred sabemos que es un gran apoyo en los comienzos y también con el paso de los años. En general, el mundo de los seguros es muy competitivo pero entre los compañeros se respira un aire diferente, incluso sin conocernos todos personalmente.
Algo tan importante como la formación, es el uso de la tecnología en el día a día de cualquier reto empresarial. Actualmente, cuento con un canal digital de ventas en www.activaseguro.com. En él se trabaja con la idea de lograr que el proyecto profesional tenga un mayor alcance. Para ello se emplean técnicas de SEO avanzadas, gestión de redes sociales y publicidad en varias plataformas.
Con recursos propios, se han ido creando aplicaciones para uso interno de Activa Seguro y en un futuro podrá estar al alcance de los clientes una App en la que se irán añadiendo funcionalidades.
Mirando al pasado, quedan atrás la máquina de escribir, el papel de calco, las propuestas cumplimentadas a manos y enviadas por fax… Hoy se impone el uso de ordenadores y tablets, gestionando bases de datos. De su análisis, dependen en gran medida las acciones que mejorarán el rumbo del proyecto profesional.
«Aunque todo lo anterior es importante, lo más valioso para mí es el trato con el cliente. No solamente desde el punto de vista comercial. Me gusta mi profesión sobre todo la posibilidad que me proporciona entablar una conversación con alguien. Puede sonar a tópico pero el cliente es alguien único e importante, con unas necesidades específicas que trato de comprender para poder ofertarle lo que necesita».
La cordialidad en el trato y el valor del detalle pueden parecer algo insignificante pero marcan la diferencia. Transmitir buen humor, interesarte verdaderamente por el cliente, amando el trabajo de cada día y viviéndolo como vocación de servicio son valores que son primordiales para mí.
Comenzaba contando que la vida es una aventura apasionante. Sorpresas y cambios de trayectoria; nada estático sino en continua evolución. Quién me diría a mí hace 30 años, que terminaría trabajando en el mundo del seguro como Corredora, emprendiendo un reto con mi propia idea de negocio. Y aquí estoy. Con ganas de seguir creciendo personal y profesionalmente. Con ganas de mejorar en todo aquello que pueda favorecer el servicio que presto a los clientes y la ampliación de horizontes comerciales. Animando también a quien tiene inquietudes para iniciar su proyecto profesional.
«Los comienzos son duros pero no hay límites para soñar despierta con lo que está por venir. Con ilusión, perseverancia en el trabajo y la bendición de Dios, mi futuro puede ser aún más apasionante».