Redacción ‘MS’- Según detalla Moné Seguros a través de un reciente comunicado, los seguros de vida en España suelen cubrir dos tipos de ocurrencias: el fallecimiento y la invalidez permanente. Es en la cobertura de incapacidad donde se está comercializando la invalidez absoluta por defecto (la que te impide trabajar de absolutamente todo), cuando la mayoría de invalideces que se reconocen son profesionales (que impide trabajar en tu profesión actual). En 2021 fueron 591.000 invalideces profesionales frente a 324.000 absolutas (casi 2 de cada 3).
«Ante esa distinción, se aprecia una tendencia creciente a asegurar la invalidez profesional, y no solo la absoluta para, de esa manera, poder protegernos ante esos sucesos. Y es que, de no tener cubierta la invalidez profesional en el seguro, si nos reconocen la misma, nuestro seguro de vida no nos pagaría ni un euro pese a no poder volver a nuestro trabajo«, expresa Moné Seguros en su comunicado.
“Cuando explicamos esa diferencia a los clientes, comprenden qué riesgos deben proteger con su seguro de vida, y que no es suficiente con el seguro de la hipoteca que únicamente está ayudando al banco, en caso de que algo les suceda.”
Gonzalo Moné, responsable de empresas y parte de la segunda generación de la Correduría Moné Seguros.