Por Lola Cabello, Head of Corporate Financial Lines de Markel
El sector asegurador, es una de las áreas menos conocidas de nuestra sociedad a pesar de que en las últimas décadas esta percepción está mejorando muchísimo.
Con cierta frecuencia me llaman amigos y familiares al saber que trabajo en “ seguros” pidiéndome ayuda para revisar sus pólizas tanto en el ámbito profesional como en el personal. Me hacen consultas que son de lo más variopintas como unas goteras , un coche roto o un tratamiento médico que no les reembolsan. Siempre les digo que no tengo respuesta para prácticamente nada porque yo trabajo en otro nicho y casi siempre me rio y pienso, mis amigas no tienen ni idea de que hago y se deben de pensar que todavía vamos muy tristes con maletín de casa en casa vendiendo seguros y que puedo ayudarles hablando con un taller, llamar a un perito, ocuparme de una gotera pero también ir a una reunión en su oficina para hablar de líneas financieras que es a lo que me dedico.
Trabajamos en un sector muy importante y es fundamental que como sociedad comencemos a familiarizarnos con los seguros. La educación y la información son clave para lograr que más personas comprendan los beneficios de contar con este tipo de protección, tanto en el ámbito personal como profesional. La cultura de la prevención es una herramienta poderosa que permite enfrentarnos a imprevistos con mayor tranquilidad y respaldo.
Creo que al igual que se fomenta en los colegios y universidades el emprendimiento, las nuevas tecnologías, los riesgos emergentes también se debería de enseñar a los niños desde el colegio que existe un sector financiero, que no es el bancario, que trabaja para dar estabilidad al tejido empresarial de un país y también a las personas protegiendo su parcela más íntima o familiar.
Aprendemos muchos conceptos en nuestra época escolar y universitaria, que no vamos a utilizar nunca más en nuestras vidas, sin embargo conceptos que vamos a necesitar siempre, como pueden ser ciertas nociones sobre economía y seguros, no son asignaturas obligatorias. Lo anterior puede ser una de las causas de situaciones tristes de nuestra población al enfrentarse a situaciones críticas que no pueden afrontar económicamente.
«Trabajamos en un sector muy importante y es fundamental que como sociedad comencemos a familiarizarnos con los seguros».
Esta última semana , tristemente me ha venido este pensamiento de forma recurrente al escuchar y leer las desoladoras noticias de las consecuencias de la Dana y acordarme por asociación del Volcán de la Palma. Me dejo muy marcada y de cierta forma triste, escuchar varios testimonios de personas afectadas, quejándose desoladas porque el seguro no les pagaba nada o una cantidad ínfima y automáticamente pensar que estas pobres personas, por ignorancia absoluta , pensaban que “el seguro” les iba a devolver lo que habían perdido, cuando en muchas ocasiones no tenían ni siquiera contratado un seguro de hogar o daños para tener garantizada una ayuda.
Los seguros no solo ofrecen una cobertura económica, sino que también brindan la tranquilidad y seguridad necesarias para que las personas y las empresas puedan centrarse en su crecimiento y desarrollo, sabiendo que están protegidos ante eventualidades imprevistas pero para ello es importante que efectivamente sepan y aprendan su valor desde jóvenes.