Redacción ‘MS’- En España, la digitalización lleva años ocupando un lugar prioritario en las estrategias empresariales, sin embargo, este impulso parece haber perdido protagonismo entre las pequeñas y medianas empresas. De hecho, sólo una de cada tres pymes tiene previsto adoptar medidas para digitalizarse a corto plazo, tal y como se desprende del II Informe de Pymes y Autónomos de España de Hiscox, aseguradora internacional que ofrece productos innovadores y especializados para empresas y profesionales.
Así lo detalla Hiscox a través de un reciente comunicado.
A pesar de que el 63,9% de las pymes españolas ha tomado o tiene previsto tomar medidas relacionadas con la digitalización, esta cifra evidencia un descenso significativo con respecto al 70,8% registrado en 2022. Este retroceso subraya que la transformación digital no está avanzando al ritmo esperado para adaptarse a las exigencias de un mercado cada vez más competitivo debido a una clara despreocupación por parte de las pymes.
En este sentido, las empresas más pequeñas, como las que no cuentan con asalariados (51,3%) o tienen un volumen de facturación menor a los 5 millones de euros (63,2%), así como las micropymes (78,9%), muestran un menor compromiso con la digitalización, a diferencia de las empresas más grandes que disponen de una mayor capacidad económica (91,6%).
Además, la situación se agrava al observar que, aunque más de la mitad de las empresas asegura contar con una estrategia digital definida, un preocupante 45,7% aún no la ha desarrollado ni implementado. Asimismo, también cabe destacar la notable reducción en la inversión destinada a las estrategias digitales: para 2025, las pymes planean dedicar sólo el 12,6% de su presupuesto general a este ámbito, muy por debajo del 18% destinado en 2022.
“El informe de Hiscox subraya la urgencia de adoptar medidas que impulsen el compromiso digital de las pymes, especialmente en un contexto global donde la innovación tecnológica es el principal motor de desarrollo económico. Sin estos avances, las pequeñas y medianas empresas corren el riesgo de quedarse rezagadas, con un impacto directo en su capacidad para competir y prosperar en sus respectivos mercados”.
Carolina Morato, directora de Marketing y Comunicación de Hiscox España.