El 77% de las empresas vietnamitas ha incrementado la búsqueda de crédito comercial como vía de financiación.
Redacción ‘MS’- De acuerdo con el último Barómetro de Prácticas de Pago de Crédito y Caución, la morosidad afecta al 36% de todas las facturas B2B de este mercado y un 3% adicional resulta impagado. Estos niveles suponen un ligero aumento con respecto a 2023 por lo que el comportamiento en pagos de los clientes se está conviertiendo en una creciente preocupación para las empresas vietnamitas, por su impacto en la liquidez y las tensiones financieras. Las principales justificaciones de los clientes para no hacer frente a sus pagos son sus propios problemas de tesorería y las ineficacias administrativas. De acuerdo con los resultados del estudio, las empresas vietnamitas retrasan los pagos de las facturas una media de un mes desde el vencimiento.
Para hacer frente a la morosidad, las empresas vietnamitas están adoptando enfoques estratégicos en la gestión del riesgo crediticio. El 77% ha incrementado su búsqueda de credito comercial, el 63% ha aportado fondos internos y el 58% ha acudido al credito bancario. El 51% de las empresas está tratando de contener sus plazos medio de cobro. Las condiciones de pago ofrecidas a los clientes B2B ahora se fijan en una media de 37 días desde la facturación. Este enfoque prudentes también ha provocado una caida del comercio B2B a crédito, que ahora afecta solo al 54% de las transacciones B2B.
«De cara a 2025, nuestro estudio muestra una gran cautela entre las empresas de Vietnam sobre las perspectivas. El 42% de las empresas prevé un incremento de los niveles generales de insolvencia. En ese contexto, el 82% prevé un aumento de la demanda de su producción, pero sólo el 65% espera que esto se traduzca en una mejora de los beneficios. respecto al comportamiento en pagos de los clientes, las empresas vietnamitas esperan que las medidas de control que han implementado sean efectivas. Solo el 14% prevé un deterioro durante 2025, frente al 72% que espera una mejora«, expresa el reciente comunicado de Crédito y Caución.
Las empresas vietnamitas enfrentan retos importantes de cara al futuro, en particular la incertidumbre económica mundial, que podría provocar interrupciones en la cadena de suministro. Además, los riesgos que más les preocupan son el posible aumento de la inflación, los costes laborales, la impredectibilidad del entorno comercial y la normativa medioambiental. Las limitaciones financieras, la escasez de trabajadores cualificados, la saturación del mercado y el rápido ritmo de los avances tecnológicos agravan aún más estos desafíos, haciendo temer por una posible limitación del crecimiento y aumento de las cargas financieras para responder a las necesidade de inversión continua.
