Redacción ‘MS’- Mutualidad de la Abogacía, entidad aseguradora sin ánimo de lucro que ofrece a los profesionales del derecho y a sus familias soluciones para cubrir todas sus necesidades de previsión, ahorro e inversión, ha celebrado hoy la presentación de la que será la hoja de ruta de la entidad en los próximos cinco años: su Plan Estratégico ADN 2023-2027 (ADN 23-27).
El protagonista de ADN 23-27 es su propósito. Un propósito revisado y renovado gracias al ejercicio de escucha y co-creación que la entidad ha realizado a sus públicos de interés: mejorar la calidad de vida de nuestros mutualistas, contribuyendo a una sociedad más colaborativa, justa e inclusiva. Para lograrlo, la entidad seguirá basando el desarrollo de su actividad en los valores en los que descansa el mutualismo: la sostenibilidad, la confianza, la transparencia y la inclusión. Y lo hará a través de cuatro grandes pilares, los grandes objetivos de este ADN 23-27: Crecimiento, Excelencia Operativa, Personas y Liderazgo Social.
La hoja de ruta para 2023-2027
Por su parte, en lo que se refiere al Crecimiento, la entidad busca hacerlo de forma solvente, sostenida, sostenible e inclusiva. Para ello, establecen un elemento fundamental: la adaptación a los nuevos entornos que puedan surgir, tanto en el ámbito social, como asegurador y financiero, manteniendo siempre la máxima de la compañía que es, también, sus grandes elementos diferenciales: la buena gestión del ahorro e inversión y el sentimiento de comunidad y la innovación en productos y servicios inclusivos que protejan y mejoren el bienestar y la calidad de vida de sus mutualistas, especialmente de los más vulnerables. Como objetivos concretos, la Mutualidad establece una meta por encima de los 13.000 millones de euros en términos de ahorro gestionado, lo que supone un crecimiento de, aproximadamente, un 34% con respecto a 2022 (más de 9.700 millones de euros) y alcanzar los 220.000 mutualistas. Además, la entidad quiere lograr un NPS, indicador que mide la experiencia de cliente, de 50, para posicionarse entre las mejores del sector asegurador y financiero español. Todo ello, acompañado por una ratio de solvencia de entre 175 y 225%, un rango en el que se ha mantenido en los últimos años.
Siguiendo con la Excelencia Operativa, esta seguirá girando en torno al bienestar presente y futuro del mutualista, protagonista de la actividad y la filosofía de Mutualidad de la Abogacía, haciéndole sentirse único en su relación con la entidad. Los objetivos en este aspecto son también muy concisos. Uno de ellos es alcanzar la digitalización global de los procesos y servicios de la compañía para que sus grupos de interés puedan disfrutar de una mutualidad digital y eficiente que los acompañe y ofrezca la mejor experiencia. Por otro lado, encontramos la implantación de una estrategia Data-Driven, clave para lograr la transformación digital de la entidad ya que mejorará el proceso de toma de decisiones. Y, por último, trabajar en la evolución de los modelos de trabajo actuales a través del uso intensivo de la tecnología, la automatización y la algoritmia avanzada. Todo ello, abogando por un uso ético y responsable del dato y manteniendo la tendencia a la innovación y digitalización que ha caracterizado a la Mutualidad en los últimos años.
En lo referente Personas, la entidad siempre ha trabajado por el bienestar de sus equipos. Con ADN 23-27, la compañía establece como propósito específico de este pilar, conseguir una mutualidad ágil, diversa e inclusiva, capaz de atraer y retener el mejor talento y donde el propósito general de la entidad se alinee con el de cada una de las personas que genere orgullo de pertenencia y confianza en la entidad. Los objetivos concretos pasan por implantar un modelo de liderazgo único y el diseño y puesta en marcha de la Política de Diversidad, Equidad e Inclusión de la compañía para conectar el propósito de la organización con las personas que la integran. Además, la entidad fija para 2027 la consecución de dos objetivos concisos y medibles en lo que se refiere a la gestión interna: mantener un grado de compromiso de 7 sobre 10 de los empleados y un eNPS, que mide la experiencia de éstos, de 40 puntos, siendo ambas superiores a la media del sector.
Por último, a través del pilar Liderazgo Social, la Mutualidad busca generar un impacto positivo, tanto en la sociedad como en sus mutualistas, y ser percibida como una institución referente de cambio y tracción social, comprometida, sostenible, inclusiva, transparente, innovadora y con capacidad de influencia en las instituciones nacionales e internacionales vinculadas. Para lograrlo, la entidad se basará en el impulso del mutualismo como “movimiento social” a través de la creación de una narrativa común con la que todos los grupos de interés se sientan identificados. Además, la entidad continuará fomentando la investigación desde Fundación Mutualidad Abogacía en sus 4 pilares, intrínsecamente ligados al nuevo propósito: cultura del ahorro, emprendimiento, compromiso social y envejecimiento. Por otro lado, la compañía también se centrará en el desarrollo de dos planes estratégicos: uno de Sostenibilidad, mucho más alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la ONU y que estará diseñado de manera colaborativa con los grupos de interés; y uno de Relacionamiento Público enfocado a la gestión estratégica de las alianzas y de las relaciones institucionales y un mayor posicionamiento público de la entidad y sus portavoces tanto a nivel nacional como internacional.
“ADN 23-27 no es solo nuestro Plan Estratégico para los próximos cinco años: es nuestra declaración de intenciones y compromisos con nuestros mutualistas, con las personas que formamos parte de la entidad y su actividad y con toda la sociedad. Los objetivos que nos hemos marcado son nuestro estandarte de calidad para con estos públicos, para que sientan una Mutualidad cercana y alineada con sus propios propósitos en términos de experiencia de cliente y empleado, de crecimiento orgánico e inorgánico y de liderazgo. Andaremos este camino con la mirada puesta en 2027, trabajando de forma simultánea en los cuatro pilares que hemos definido, ya que no se tratan de compartimentos estancos, sino de vasos comunicantes, y lo haremos basándonos en los valores que descansan sobre el mutualismo y en dos ejes vertebrales: la sostenibilidad y la digitalización”.
Enrique Sanz Fernández-Lomana, presidente de Mutualidad de la Abogacía.