Ana Ibáñez, neurocientífica

No hablemos de lucha contra el cáncer: la enfermedad se padece, no se combate

El Reto Pelayo Vida ayuda a equilibrar la balanza, las expedicionarias han tenido que enfrentarse a la enfermedad, pero ahora lo harán a un reto que sí han elegido.

Redacción ‘MS’- Las cinco expedicionarias, que han superado la enfermedad y se irán de expedición a la Antártida en noviembre, manifiestan su incomodidad ante el término “lucha” contra el cáncer. En palabras de algunas de ellas como, Cruz Álvaro o Macarena Bohórquez explican:Te atribuyen una responsabilidad que no te corresponde, porque por más que luches, no está en tu mano. Puedes hacer todo lo que la ciencia diga que puedes hacer, pero hasta ahí”. Yo preguntaba cuando iba al médico: ‘¿Qué puedo hacer?’ y me respondía que ‘nada’ cada vez. La sensación es de no poder más que esperar, ponerte en manos de los médicos, hacer cosas que te sientan bien y rezar porque la medicina haya llegado a donde tú necesitas y que todo vaya bien’”.

Marta Castillo, otra de las cinco elegidas para la expedición,ha querido compartir este reciente titular Actriz Shanen Doherty pierde batalla contra el cáncer”. Doherty no perdió la lucha contra el cáncer, porque la enfermedad no se combate, se trata. Por eso no se debe responsabilizar a las personas que la padecen de los resultados de “guerras” o “batallas” que no decidieron librar.

¿Cómo tratar la enfermedad?

Ana Ibáñez, neurocientífica experta en el entrenamiento para el alto rendimiento cerebral de equipos deportivos en todo el mundo, trabajará con ellas antes de que emprendan su aventura a la Antártida para que el duro viaje “además de un reto, sea también un regalo”. Ana afirma que es normal que no se sientan comprendidas y que solo lo harán por completo por aquellos que hayan pasado lo mismo. 

Las expedicionarias reconocen que cada uno reacciona lo mejor que puede, o que sabe, cuando comunican a su círculo que padecen la enfermedad. Y que ese proceso también es duro. Macarena cuenta su experiencia: “El día que yo necesitaba desahogarme, el día que necesitaba llorar, expresar mis miedos… Ese día intentaban animarme lo mejor que podían: ‘Venga, mujer, que no pasa nada’. Y yo lo que necesitaba era llorar, era quejarme”.

Ana Ibáñez concluye que El Reto Pelayo Vida ayuda a equilibrar la balanza: las expedicionarias han tenido que enfrentarse a un reto que no han elegido, la enfermedad, pero ahora lo harán a uno que sí han elegido, por el que están esforzándose y que es una oportunidad única en la vida.

Visibilidad más allá de las operaciones

Yo creo que no se entiende la enfermedad”, explica Macarena. “A mí me dio esa sensación, por ejemplo, con los efectos secundarios. No es que te extirpen el tumor, te den tu tratamiento, haya funcionado y se acabó. Después vienen un montón de efectos secundarios, etc.Creo que habría que hablar más de los procesos emocionales y de las consecuencias físicas a largo plazo. Yo de esto no tenía ni idea y creo que, visibilizándolo más, el apoyo sería mejor”.

Diez años de reto y muchas sorpresas

Pelayo Seguros lleva 10 años transmitiendo un mensaje de superación personal a todas las mujeres que ya se han curado de cáncer y a aquellas que lo padecen. Entre las sorpresas para celebrar esta X Edición del Reto Pelayo Vida, además de la preparación con Ana Ibáñez, cada expedicionaria contará este año con una madrina que la apoyará en todo el proceso: Ariadne Artiles, Laura Vecino, Paula Ordovás, Elena Sánchez, Teresa de la Cierva y Marta Barroso se han sumado a la aventura. El objetivo: llegar cada año a más mujeres.

Puede accederse a los vídeos de Ana Ibáñez (neurocientífica) sobre el Reto Pelayo Vida a través de los siguientes enlaces:

https://vimeo.com/ebano/review/991450029/0dda21dd38

https://vimeo.com/991450052/2cac1afd37?share=copy