Tamara Alonso (Fisioterapeuta): «Admiro a las mujeres porque somos vida, heroínas que luchamos cada día por las personas a las queremos con uñas y dientes»

‘Muy Segura’ entrevista a Tamara Alonso, Fisioterapeuta especializada en disfunciones urogenitales femeninas.

¿Cómo fueron los inicios de su andadura profesional? ¿Qué hitos más significativos identifica a lo largo de su trayectoria?

Terminé mis estudios de Fisioterapia en 2001, desde entonces he trabajado sin parar, me siento muy afortunada. Los comienzos, como siempre que terminas una carrera y eres joven son duros, estás desorientada, parece que sales a un universo nuevo y descocido sin saber nada. Trabajé en clínicas que colaboraban con mutuas de salud, donde se trabajaba una fisioterapia tradicional, enfocada a la traumatología, reumatología, geriatría, deportiva… pacientes cada 15 minutos y carreras por los pasillos, alarmas que sonaban constantemente y te indicaban que los aparatos terminaban y había que pasar al siguiente. El CMB, los servicios médicos del Banco de España, atención domiciliaria en la hora de la comida para optimizar el tiempo, postgrados los fines de semana, trabajos extra como masajista en balnearios urbanos… una locura.

Un día me senté a pensar y no era lo que quería. No me importa trabajar horas y horas y con 20 años, menos. ¿Pero qué atención le estaba dando al paciente? ¿cuánto tiempo le dedicaba? y sobre todo ¿cómo me hacía sentir eso a mi? ¿qué decisiones estaba tomando yo sobre el trabajo que hacía? Todo mecanizado, tiempos marcados, siempre corriendo. Mucha cantidad y no la calidad que a mi me gustaba ofrecer. Entonces decidí abrir mi propio negocio, un centro multidisciplinar dedicado a la salud y el bienestar. Fueron 8 años de aprendizaje, de éxito, de conocer a profesionales maravillosos de los que aprendí muchísimo y a pacientes y clientes, que hoy conservo como grandes amigos. Fue un capítulo de mi vida profesional muy bonito e inolvidable.

En época de crisis las cosas se pusieron difíciles y tuvimos que cerrar, un revés que me hizo reinventarme y que me enseñó mucho también. Esa época fue la primera toma de contacto con el sector de la fisioterapia y medicina estética y la formación a profesionales de la estética. Colaboré con importantes laboratorios del sector de la farmacia y cosmética natural como formadora y volví a trabajar en primera línea, esta vez en un entorno más modesto, pero con la misma ilusión y ganas de siempre.

En una de las formaciones en las que coincidíamos profesionales de la estética y de la salud conocí a una compañera, una fisioterapeuta especializada en tratamientos de disfunciones de suelo pélvico y su formación y trayectoria me impactaron mucho, supe que tenía la oportunidad de reconciliarme con mi profesión, que era el momento perfecto y que quería hacerlo. Desde entonces no he dejado de prepararme y de trabajar y no me equivocaba. Un buen amigo un día me dijo: “estás descubriendo lo realmente fascinante que es tu profesión y que todavía no sabías, nunca es tarde” y que razón tenía.

¿Por qué su enfoque en el universo del cuidado femenino, desde varias de sus vertientes?

Porque admiro a las mujeres, porque somos vida, porque somos heroínas que luchamos cada día por las personas a las queremos con uñas y dientes. Porque vivimos en el dar y me encanta encargarme de que también podáis recibir. Me gusta ocuparme de la mujer desde un enfoque multidisplinar, como base del cuidado holístico y de la necesidad que tenemos de sentirnos bien por fuera como perfecto reflejo del yo que tenemos dentro.

¿Qué significa para usted la cosmética aplicada al mercado de la mujer? ¿Cuál es su experiencia al respecto?

Si buscas la definición de cosmética lo que encuentras es que son productos, mezclas de activos que se aplican para prevenir, mejorar o corregir imperfecciones. Creo que la cosmética se ha convertido en un concepto mucho más amplio y con mucho más peso. La cosmética es un puente a la belleza integral, de nuevo menciono el cuidado de la mujer desde un punto de vista holístico. Un concepto que está en continuo cambio y crecimiento, adaptándose de una forma muy rápida al mercado. Quizás porque la esperanza de vida es mayor y cada vez le damos más importancia a como envejecer. Quizás por las generaciones de jóvenes que cada vez empiezan a cuidarse antes o por los canales de venta como las redes sociales, un mercado que te lleva productos y tutoriales hasta tu casa y que pone a disposición de todas, trucos de belleza, cómo sentirse mejor, la importancia de la alimentación y el deporte, en definitiva bienestar integral.

En el ámbito de la salud y el bienestar femenino, nos consta que está especializada en suelo pélvico, ¿puede contarnos un poco más de esta área suya de actuación y qué proyecto está desarrollando?

Si, he descubierto una especialización de mi profesión que me fascina y me enseña muchísimo cada día. Me hace trabajarme mucho, para poder ofrecer lo mejor a las mujeres que atiendo.

Una breve definición técnica de qué es el suelo pélvico, para que sirve y cuales son sus posibles disfunciones. El suelo pélvico es un conjunto de músculos, ligamentos y fascias, su función principal es la de sostén, la continencia, la función sexual y el parto. Las principales disfunciones del suelo pélvico son la incontinencia, los prolapsos, las disfunciones sexuales y el dolor pélvico crónico. Afecta a toda la población, pero es más frecuente en las mujeres.

Como definición es lo que es, pero obviamente nuestra labor es mucho más y a esto si que quiero dedicar unos minutos. No es solo labor de fisioterapeutas, es labor de un equipo de sanitarios que debemos trabajar con todas nuestras herramientas por y para la mujer: fisioterapeutas, ginecólogos, psicólogos, sexólogos, psiconeuroinmunólogos, especialistas en deporte, nutricionistas, endocrinos, médicos de familia… Estamos en el camino, pero queda mucho por hacer. Suelo pélvico va mucho más allá, suelo pélvico es postura, es emoción, es movimiento, es flexibilidad, es sentir, es conocerse, es quererse, amarse, escapar de los mitos y los estigmas, cuidarse, es ponerse en el “soy capaz”, es dejar el miedo atrás, es confiar.

Mi próximo proyecto es empezar de nuevo, actualmente trabajo en una consulta, pero se que pronto, cuando todo se calme y volvamos a respirar normalidad abriré de nuevo un espacio dedicado a la mujer. Un espacio con todos lo profesionales que pueden ofrecernos herramientas para encontrarnos y sentirnos mejor. Fisioterapeutas, psicólogos, ginecólogos, psiconeuroinmunólogaos, especialistas en ejercicio terapéutico, nutricionista, etc…

¿De qué manera considera que la actual pandemia del coronavirus ha influido y lo sigue haciendo, sobre el universo de la salud y el bienestar femenino?

Bueno… yo intento ser siempre lo más positiva posible. El confinamiento ha sido un suceso sin precedentes, nadie estaba preparado, nadie tenía la fórmula perfecta para enfrentarse a una cosas así. Afortunadamente no he tenido que sufrir ninguna pérdida de un ser querido, pero si he tenido cerca a íntimos amigos que han tenido que despedirse desde la distancia de padres, madres, abuelos, amigos… Esto ha dejado mucho vacío, una situación laboral y económica muy complicada y emocionalmente estamos pagando y pagaremos las consecuencias. No puedo evitar hacer esta mención para poyar a tanta gente que lo ha pasado y lo está pasando tan mal.

La pandemia ha puesto a nuestro alcance hábitos que antes eran impensables, ha acercado a nuestro hogares la vida cotidiana que antes teníamos fuera. Nos ha hecho parar en seco y nos ha permitido pensar en nosotros, pasar tiempo con nosotros y creo que priorizar cosas que antes estaban en otro lugar. Ese tiempo que hemos pasado con nosotros nos ha enseñado la importancia de cuidarnos, de alimentarnos bien, de hacer ejercicio, de hacer un esfuerzo por mejorar nuestra calidad de vida. Aunque tomamos todas las precauciones necesarias, mucha gente sigue teniendo miedo, pero si que es notablemente visible, que hemos colocado a la salud y el bienestar en otro lugar, ahora es prioritario.

¿Cree que la mujer, por el hecho de serlo, tiene una sensibilidad especial hacia las áreas y facetas de negocio que usted trabaja? ¿Por qué?

Si, estoy segura. Si hay alguna mujer que no tiene sensibilidad hacia estas áreas, es porque las desconoce. Puedes querer hacer uso de ellas o no, pero lo que tengo claro y vuelvo a repetirme es que el cuidado holístico por fuera expresa tu ser más profundo y este a su vez se nutre de lo que ve. Somos fuertes, somos poderosas, sostenemos mucho y cuidarse es un regalo bien merecido, ya sea hablando de la belleza y el cuidado personal, como de la salud íntima.

¿Qué proyectos va a desarrollar a lo largo de este año y con qué objetivos?

Bueno, a lo largo de estos años me he dedicado mucho a la belleza y llegó un momento cuando empecé a dedicarme a suelo pélvico, que cometí el error de pensar que tenía que elegir, un área u otra. Y no, estaba muy equivocada. La palabra salud parece que tiene más peso, más trascendencia, más seriedad y no te puedes imaginar los casos que yo he tenido entre mis manos de mujeres que no confiaban en sí mismas, que pasaban por un momento difícil, que no se creían capaces y como a través de la imagen han sufrido un transformación brutal, han empezado a gustarse, a quererse, a afirmar que son capaces, a pisar fuerte y mirar al frente. ¿Podemos seguir pensando entonces que la belleza hay que dejarla en un segundo plano? Yo creo que no.

Por tanto, enfocada ahora más en suelo pélvico, mi proyecto es crear un espacio donde la mujer pueda encontrar un equipo de profesionales de la belleza, el deporte y la salud, y que puedan estar acompañadas y guiadas en la transformación que cada una necesite. Cuando verbalizo esto se me llena la cara de luz y me emociono muchísimo, estoy en el camino.

¿Desea trasladar un mensaje a la mujer profesional, que constituye una parte muy destacada de la audiencia de Muy Segura?

 ¡Si! Os admiro muchísimo porque sois mujeres, porque tenéis la capacidad de dar vida, porque tenéis la capacidad de decidir, porque sois fuertes, porque podéis, porque tenéis la capacidad de vivir muchas facetas en vuestra vida: hijas, madres, parejas, amigas, amantes, grandes profesionales, directoras de logística en vuestros hogares, organizadoras de eventos, magníficas chefs, grandes dadoras y merecedoras también de recibir.

Y dándole un poco de protagonismo al suelo pélvico, que es lo que me ocupa actualmente y para lo que me faltan horas en el día, mujeres prestad mucha atención a esto:

El paso del tiempo es algo normal y fisiológicamente el cuerpo sufre cambios. Todas estamos  preparadas para esto, la edad no es mala, la edad es plenitud, es seguridad, es sexualidad, es fuerza, es empoderamiento, entonces: NO normalicemos la incontinencia, NO normalicemos el prolapso, NO normalicemos el dolor durante las relaciones sexuales, NO normalicemos la sequedad vaginal, NO normalicemos la disminución de sensibilidad, hay vida después de los embarazos y los partos, NO estigmaticemos la menopausia, hay vida después de la menopausia.

¿Quiere añadir algún comentario o reflexión adicional?

Cualquier oportunidad de divulgar es un regalo y agradezco a Flor Cid esta maravillosa oportunidad y a vosotras lectoras vuestro tiempo.